Todos sabemos lo que es un bukake. A estas alturas de la película, no hay quien no haya, al menos, oído hablar de este tipo de práctica sexual. Lo de haber participado en uno, a uno u otro lado de la barrera, ya es otra cosa. Lo que sí es cierto es que el bukake es una práctica sexual que cada vez está más extendida a todos los niveles.
El bukake, como ya conocemos, es una práctica sexual que se realiza en grupo. Consiste, básicamente, que que un montón de tíos se corren encima de una mujer. Ese esl el punto común de todas las prácticas de este tipo. Pero, en medio, las posibilidades de variación son casi infinitas. En unos casos, la chica va chupando los miembros viriles e cada uno de los participantes. En otros casos, son los propios chicos los que se masturban para acabar en la cara de ella. Hay casos en los que el semen acaba en la cara. Existen otros en los que las corridas se distribuyen por todo el cuerpo. En algunas ocasiones la chica va totalmente desnuda. Hay prácticas en los que la chica va totalmente vestida. La variedad, como podemos observar es muy grande.
Otra de las posibilidades de variación para un bukake tienen que ver con la forma de hacer llegar el esperma a la interesada. En unos casos se aplica directamente el fluido sobre la persona que nos ocupa. Mientras que, otras veces, se deposita en algún tipo de recipiente que, finalmente, se hace llegar a la señorita en cuestión. También existen diferentes opciones con el uso que se hace de la lefa. Algunas veces se utiliza como loción para extender a lo largo del cuerpo de la muchacha. En otros casos, la contribución de esperma sirve para alimentar a la interesada. Un mundo esto de los bukakes.
Pero, sin duda, lo más curioso del bukake está en sus orígenes. Se trataba de una práctica típica de la Edad Media japonesa. Utilizaban esta técnica para castigar a la smujers que habían sido infieles a sus esposos. Posteriormente, el mundo del porno e Internet obraron el milagro.