EL Tuppersex hoy es muy conocido. Hubiera sido impensable en 1950, cuando resultaba toda una revolución que las señoras del barrio se juntaran en casa de una vecina para ver muestras de fiambreras y recipientes con tapa para guardar el puré de patatas, que, tan sólo 50 años más tarde, las nietas de estas señoras se juntasen en casa de una vecina, en una reuní´n de Tuppersex, para ver juguetes sexuales, lencería erótica, afrodisiacos, lubricantes, etc.