Viajar con juguetes sexuales a veces no resulta fácil. Cada vez resulta más común que nuestras experiencias sexuales incluyan algún juguete sexual. Esto resulta igual de frecuentes para hombres que para mujeres. Sin embargo, acompañarnos de ellos en determinados viajes no resulta tan sencillo. Parece lógico pensar que cuando vamos a disfrutar de días de asueto nos apetezca utilizar este tipo de complementos que, durante el año, no tenemos tiempo de disfrutar como merecen. Por eso dejas con juguetes sexuales como cuando salimos de vacaciones, es algo cada vez más frecuente. Sin embargo, también es algo bastante complicado en algunos casos.
Cuando queremos viajar con juguetes sexuales lo primero que tenemos que tener en cuenta es el destino. Uno de los países más restrictivos en este sentido es Vietnam. De hecho cualquier tipo de juguete erótico que sea detectado en la aduana es confiscado. Bien es cierto que se lo quedan en depósito Y a la salida del país lo devuelven. No sabemos qué uso hacen de ellos mientras los mantienen confiscados. Un misterio.
El asunto de viajar con juguetes sexuales se complica excepcionalmente algunos países si el material en cuestión tiene alguna connotación LGTBI+. En algunos lugares esto se lleva al extremo. Viajar con un libro con contenido homosexual puede implicar problemas muy importantes. Otro tipo de material como, por ejemplo, un dildo también nos puedes meter en un buen lío. Cuando viajamos a países donde no existes mucho respeto por los derechos humanos es necesario informarse bien antes de llegar.
En los aviones, hay que tener cuidado cuando queremos viajar con juguetes sexuales. En el equipaje de mano no se permiten un bueno número de objetos. Por ejemplo, las esposas. Por supuesto, cualquier tipo de herramientas punzante. Pero tampoco se permiten juguetes que tenga una longitud de más de 17,5 cm de largo. Dado que las baterías de litio están prohibidas en la bodega de los aviones un buen número de vibradores con batería integrada tampoco estarían permitidos. No sólo como equipaje de mano. Tampoco podríamos facturar. Resulta conveniente que nos enteremos de la política al respecto de estas cuestiones de la compañía aérea elegida antes de emprender un viaje.