¿Quién no ha surcado alguna vez las procelosas aguas de la eyaculación precoz?
Aunque todos lo neguemos, y yo el primero, en algún momento alguna de nuestras amantes nos ha soltado esa expresión, o alguna similar, acompañada de una gran cara de asombro. La pobre se ha quedado sin palabras después de que, tras un par de bombeos, nuestro pequeño amigo haya echado el resto y se haya negado a continuar. Ella, que se esperaba una gran explosión de fuegos artificiales de placer, se ha tenido que conformar con un petardillo que apenas ha explotado. La eyaculación precoz, ha hecho acto de presencia. Sin avisar y por sorpresa. Aun así, se ha rehecho rápidamente y se ha puesto a consolarnos:
– ¿Yaaa? Bueno. No te preocupes. No pasa nada. Es muy normal. Os pasa a todos los tíos. No tiene importancia.
Vamos a ver, si es muy normal y nos pasa a todos, ¿por qué te has quedado tan pasmada? Que tenías que ver la cara que se te ha quedado. Uno no se sorprende de las cosas habituales. Entonces, ¿la eyaculación precoz es habitual o no lo es? Continuar leyendo «La eyaculación precoz: “¿Yo? Nunca”»