El polvo rápido es una de las modalidades de sexo más utilizada. De hecho, hay personas que sólo saben utilizar esta opción pero esto, como dicen los clásicos, es otra historia y deberá ser contada en otro momento. El «aquí te pillo aquí te mato», también es un clásico. En muchas ocasiones supone para quienes lo practican un suplemento de vitalidad y autoestima tremendamente satisfactorio. En general, las relaciones sexuales satisfactorias se basan en encuentros relajados sin prisas y a los que se puede dedicar el tiempo necesario para su disfrute. Sin embargo, el polvo rápido puede ser una alternativa más que válida para salir de la rutina y para aportar algo de sal y pimienta, por ejemplo a una relación de pareja más o menos estable.
Categoría: Erotismo
El arte de insinuar pero no mostrar explícitamente, es el erotismo, que incentiva la imaginación y la pervierte de una manera sugerente y dulce estimulando todos nuestros sentidos.
Besar en el cuello
Besar en el cuello puede ser tremendamente excitante. De hecho, resulta igualmente excitante para quien da el beso como para quien lo recibe. Está claro que recorrer la piel de alguien repartiendo besos de diversa índole es algo muy excitante como, de igualmente manera, resulta excitante ser recorrido o recorrida por los besos de alguien. De hecho, puede que estemos ante uno de los juegos previos más excitantes de todos. Recorrer la piel es excitante pero especialmente excitante es recorrer con la lengua las zonas erógenas. Y no hay zona erógena más sensible a la lengua ajena que el cuello. Besar en el cuello, sin duda, se trata de un verdadero placer en sí mismo.
Besar los pies de una mujer
Besar los pies de una mujer puede llegar a ser un momento terriblemente sensual. tanto para él como para ella. Cuando nos metemos en materia sexual, casi todo vale. Y está boyen que sea asó. Dejar rienda suelta a nuestra fantasías, siempre, es la mejor elección posible si hablamos de alcanzar la máxima salud sexual posible. EL fetichismo, por supuesto, es una opción más y, por lo tanteo, puede llegar a resultar tan interesante y excitante como cualquier otra. Dentro de los fetichismos, si hay uno especialmente atractivo es el que tiene que ver con los pies. Muchas son las personas que disfrutan observando, oliendo y, por supuesto, llegando a besar los pies de una mujer.
La podofilia y masturbar con los pies
Cuando hablamos de la podofilia, lo estamos haciendo de una parafilia que produce una atracción sexual de muy alta intensidad por los pies. De esta manera, cuando se produce una observación, un simple contacto físico o, in causo, su manipulación, la excitación sexual lanza niveles altísimos. Se trata de una parafilia que tienen una mayor presencia entre los hombres que entre las mujeres, aunque se da en ambos sexos. Cuando la podofilia está presente en un varón, la máxima aspiración sexual en este sentido es la masturbación con los pies de su pareja. Mastrubar con los pies.
Masturbar a una mujer
Masturbar a una mujer no es tarea fácil cuando la experiencia no es mucha. Hay que tener en cuenta que la autoexploración nos permite, desde muy jóvenes, llegar a momentos de placer que, hasta que empezamos a descubrirlo no habíamos podido ni imaginar. Esta circunstancia es especialmente significativa en el caso de las mujeres. Su uso de la masturbación para conocer su propio cuerpo, generalmente, desemboca en el desarrollo de sus propias técnicas que son las que mayor placer le proporcionan. Acceder a ellas desde la ignorancia de una tercera persona tiene un proceso de aprendizaje que la experiencia suaviza. Os vamos a dar algunas reglas genéricas para aprender a masturbar a una mujer.
Excitar para el sexo anal
Excitar para el sexo anal a una chica. no siempre es tan sencillo como pudiera parecer. Aún siendo una práctica tremendamente placentera para ambos participantes, sierpe que se practique de una forma correcta, el tipo de estimulación propio de esta práctica es tan significativamente diferente que requiere su propia técnica. Para la mujer, encontrar otras vías de placer siempre es excitante y, en el caso de los hombres, la mayor capacidad que presenta el ano, frente a la vagina, fundamentalmente por tratarse de un conducto más estrecho, hacen que esta práctica sea muy placentera. Sin embargo, bien sea por prejuicios o por el miedo a sufrir dolor, hay muchas mueres que no se atreven de dar un paso adelante. Para que todo salga bien es necesario que sepamos cómo se ha de excitar para el sexo anal a una mujer.
Sexo sin penetración
El sexo sin penetración puede ser terriblemente placentero para una mujer. Siempre andamos con la idea en la cabeza de que el sexo, para ser excitante para una mujer, ha de contar con una penetración vaginal al uso. Sin embargo, la realidad es otra bien distinta. Por supuesto que es posible excitar a una mujer y hacer que disfrute sobremanera del encuentro sexual a pesar de que este no haya contado con la consabida penetración. Acariciar, besar, chupar, en fin, dedicarse a la estimulación del cuerpo femenino con absoluta devoción puede resultar tan gratificante para ellas con un coito convencional. El sexo sin penetración también puede ser muy provechoso para una mujer.