Hay que tener más sexo. Mantener relaciones sexuales siempre está bien. Hacer que el número de éstas crezca debería ser uno de los subjetivos a a plantearnos cada vez que tengamos ocasión. los propósitos del año nuevo, podría ser un une momento, sin duda, pero el inicio de las vacaciones de verano, también es un momento fantástico para que nos propongamos aumentar el número de relaciones sexuales. Por si acaso no estás muy de acuerdo con esta afirmación, te vamos a tratar de seducir aportándote un buen número de razones para tener más sexo.
Categoría: Actualidad
Temas de actualidad que atañen especialmente a las muejres y nos influyen en nuestro día a día.
Mentiras de los hombres para tener sexo
Las mentiras que llegan a utilizar los hombres para tener sexo pueden ser de lo más variadas. Sn tantas las que pueden llegar a utilizarse como varones hay en el mundo y ocasiones para mantener un encuentro sexual. Resulta habitual que, por las circunstancias que sean, un varón se encuentre en una situación en la que cree tener opciones de lavares a la cama a la chica que acaba de conocer. Es muy difícil que en esa última fase un hombre sea honesto y trate de inclinar la blanca hacia sus deseos seduciendo a su pareja sin más, En la mayoría de las ocasiones, por el contrario, la forma de definir la situación se caracteriza por el uso de mentiras. hoy vamos a hacer un pequeño recorrido por las más típicas.
El sexo de reconciliación
El sexo de reconciliación, en algunas ocasiones, no es una buena idea. A todos nos ha pasado que hemos discutido por cualquier tontería con nuestra pareja. A todo nos ha pasado que, tras el enfado inicial, nos hemos dado cuenta de que, al fin y al cabo, la discusión era sobre algo totalmente trivial y que, en cualquier caso, quién tuviese la razón sobre esto en particular no era algo determinante para nada. A todos nos ha pasado que, en una situación similar a la descrita, hemos elegido el mejor vehículo para dejar atrás las asperezas: el sexo de reconciliación. Sin embargo, si bien es algo que, en muchas casos, funciona, hay algunas circunstancias en las que no resulta la mejor idea.
Sobre el sexo aburrido
El sexo aburrido es algo que puede aparecer en la vida de una pareja que lleva mucho tiempo junta o, incluso, en aquellas parejas que tienen intereses sexuales diferentes. Además, puede que sea un tema difícil de tratar con tu pareja por lo que es bastante posible que, cuando aparece, se perpetúe en el tiempo. Sin embargo, el sexo no tienen por qué ser aburrido. Si lo es, en gran parte, es porque tú quieres. Siempre hay cosas que puedes hacer para cambiarlo. Si de verdad lo quieres, puedes conseguir huir del aburrimiento sexual.
El perfume y la atracción sexual
¿El perfume y la atracción sexual están relacionados?Es más que evidente que vivimos en una época donde nos inunda un consumismo devastador. Quizás por eso, no tardamos mucho tiempo en incorporar cualquier tipo de complemente y accesorio que nos sugiera algo a nuestro armario. Esto sucede en todo tipo de tendencias. Podemos hablar de ropa, en la manera de llevar el pelo, en la música que consumimos, cómo no, en el tipo de perfume que utilizamos.
Cosas sobre la eyaculación
La eyaculación es algo que nos preocupa. pero no hace tanto que esto es así. Hasta los años setenta, aproximadamente, a nadie le importaba si un hombre eyaculaba pronto o tarde. A nadie se le ocurría cuestionar la sexualidad de una persona en función de lo rápido que fuera capaz de eyacular. Al contrarío, se valoraba la capacidad de un hombre para eyacular sin problemas. En realidad, esta circunstancia no era más que un evidente signo de la sociedad machista en la que tradicionalmente ha estado conviviendo la raza humana. A la mujer, especialmente en el sexo, no se las valoraba tal y como merecían y prácticamente eran utilizadas como cuerpos puestos al servicio de los hombres. Realmente vergonzoso.
¿Fingen los hombres los orgasmos?
¿Fingen los hombres los orgasmos? Es una imagen que seguro que nos cuesta un poco hacernos. En cambio, seguro que se¡i la pregunta se realiza cono mujeres no encontramos ningún problema en imaginarnos una situación parecida. Y es que nuestra sociedad machista no puede, siquiera, concebir la idea de que un hombre finja los orgasmos. Me imagino una sala de espera de, por ejemplo, una consulta ginecológica, donde una buen número de mujeres espera su turno. Si alguien entrase y realizase en voz alta, dirigiéndose al auditorio, la pregunta que hemos formulado: ¿fingen los hombres los orgasmos? Estoy prácticamente seguro de que la única respuesta sería las risas desatadas de las pacientes.