El clítoris en 3D ha venido para revolucionar el panorama sexual europeo. Al menos eso es lo que parece. De siempre, hemos escuchado los reproches de las mujeres en relación a lo desconocido que par ala mayoría de los hombres resultaba el clítoris. Su complicado manejo ha supuesto más de una frustración en la vida sexual de la mayoría de las mujeres. Hablamos, naturalmente, de los casos en los que el que está a los mandos es un varón. Pues bien, los franceses, civilización avanzada a su tiempo en multitud de cuestiones sociales, una vez más, ha dado en el clavo. Las clases de educación sexual que reciban los jóvenes en los institutos contarán con el apoyo de un clítoris en 3D que se utilizará para llevar a cabo las prácticas opotunas. Genial, ¿no os parece?
En realidad, las similitudes entre el pene y el clítoris son tantas que, a pesar de que nunca nos lo han enseñado así, son prácticamente iguales en anatomía, diferenciándose, sólo, en su tamaño y en el recorrido que hacen por neustro cuerpo, por lo demás, son órganos totalmetne análogos. A pesar de todas estas coincidencias, resulta habitual encontrar libreos educacticos con un buen número de páginas dedicadas al pene y no resulta tan facil encontrar espacio referido al clítoris. El clítoris en 3D como material de apoyo docente puede ser, sin duda, una buena solución.
Resulta tremendamente importatn que las mujeres sean capaces de hacerse una idea mental de qué es lo que está sucediendo en sus cuerpos cuando se producen los estímulos adecuados. Las mujeres, al igual que los hombres, tienen erecciones cuando se excitan sexualmente. Lo que sucede en su caso es que la mayor parte del recorrido del clítoris es interno y, por lo tanto, no visible, lo que hace que no tengamos esa imagen visual. El uso del clítoris en 3D para uso docente pretende, entre otras cosas, mostrar lo que, ahora, no resulta evidente.
El clítoris en 3D ya está disponible en internet para su descarga gratuita para docentes de cualqueir parte del mundo y su posterior impresión en 3D.
