¿Cuánto tiempo debe durar el coito antes de la eyaculación? Por supuesto, la respuesta variará en función a la persona a la que preguntes. En esto, como en casi todo, cada uno tiene su opinión y sus gustos. La erección promedio está en torno a los siete minutos. Sin embargo, como todos sabemos, hay hombres que la mantienen durante menos tiempo y otros que lo hacen durante más tiempo. Al margen de los números, lo realmente importante cuando uno manteen sexo es que la diversión fluyan entre las dos partes de la pareja y, aún en el caso, de que la duración de la erección se prolongue por encima de la media, en ocasiones precisamos una mayor duración. Por eso vamos a dar unas cuantas ideas para retrasar la eyaculación.
El truco de utilizar una distracción mental para retrasar la eyaculación es muy utilizada y su eficacia puede llegar a ser muy alta. Consiste, básicamente, en comenzar a pensar en algo que no nos produzca ninguna excitación sexual. Nuestros jefe cabreado pidiéndonos explicaciones por algo que no hemos hecho como se esperaba o nuestro suegro hablando de política son algunas de las imágenes tan potentes que seno capaces de parar la eyaculación a cualquiera. Cada cual, sin embargo, ha de buscar las suyas. no hemos de olvidar que hemos de utilizado solo durante unos segundos para evitar eyacular. Mantenerlo demasiado tiempo podría dar al traste con nuestro encuentro sexual.
Alternar posturas sexuales es otra buena idea si de retrasar la eyaculación se trata. Para la excitación sexual se puede conseguir de varias formas. Detener la penetración por los segundos necesarios para poner en práctica otra posición sexual es una de ellas. Si la nueva postura, además, requiere de unos cuantos segundos de preparación nos dará un respiro suficiente para evitar que eyaculemos.
Sin embargo, no hay nada que haga retrasar tanto la eyaculación como el entrenamiento. La práctica sexual frecuente es la mejor forma de conseguir controlar a nuestro antojo tanto el coito como la finalización de éste. Por lo tanto, lo que debemos hacer es practicar todo lo que podamos, aumentar el número de encuentros sexuales hasta convertirnos en verdaderos expertos del control de la fuerza.
