La mayoría de las veces, ponemos mucho cuidado en tratar de conseguir la velada perfecta: ambiente relajado, velas, música, aromas… nos arreglamos para la ocasión y planeamos hasta el último detalle para que todo salga perfecto. A pesar de todo esto, muchas veces se producen algunos contratiempos que no estaban previstos en el guion. Te contamos cuáles son los 10 posibles incidentes más habituales durante el sexo.
1- Dolores musculares y tirones. Es algo muy habitual. No debemos olvidar que el sexo es ejercicio y, en este caso, nunca estiramos antes de practicarlo. En caso de que se produzca algún tipo de tirón, lo mejor es parar y estirar un poco el músculo hasta que se nos pase.
2-Pillarse el pelo. Aunque un pequeño tironcillo en un momento determinado puede resultar muy excitante, lo habitual es que, si tienes el pelo largo, tu pareja te pueda dar algún tirón cuando se intente apoyar o quiera cambiar de postura.
3- Nos caemos de la cama. Cuando cambiamos varias veces de postura, es fácil que perdamos la noción del espacio y que nos apoyemos en un lugar donde ya no hay cama, con la consiguiente caída. Normalmente este incidente no va más allá de unas risas.
4- Se rompe el condón. A veces ocurre que el preservativo se rompe mientras estamos practicando sexo o incluso que se quede dentro de la vagina. Debemos pensar en recurrir a algún tipo de anticonceptivo de emergencia.
5- Riesgos del Kamasutra. Hay que tener en cuenta que algunas de las posturas del Kamasutra requieren de una buena forma física y de bastante flexibilidad. Practicarlas sin estar en forma nos puede acarrear algún susto.
6- Ruidos incómodos. Cuando la vagina no presiona bien al pene o cuando los movimientos son muy rápidos, se pueden producir las llamadas “ventosidades de la vagina”. Aunque no huelen, es normal que produzcan algo de vergüenza. Podemos reducir estos ruidos contrayendo los músculos de la vagina durante la penetración.
7- Romper objetos. En momentos de pasión, es fácil que no sepamos muy bien dónde estamos poniendo los brazos y las piernas y que algún objeto pueda resultar dañado. Mientras los daños sólo sean materiales, no debemos preocuparnos.
8- Dolor durante la penetración. Una penetración demasiado efusiva o una lubricación deficiente pueden hacer que el coito resulte doloroso.
9- Garganta no tan profunda. Se pueden llegar a producir nauseas o arcadas si se introduce demasiado el pene en la boca. Debemos tomárnoslo con más calma.
10- Malos olores. También podemos encontrarnos con alguna ventosidad anal producida principalmente en el momento del orgasmo. Aunque estás si desprenden un desagradable olor, debido al momento en el que nos encontramos, no solemos prestarles mucha atención. Después podemos hacer como que nada ha pasado o echarnos unas risas por ello.