EUna buena forma de mejorar la relación de parejaes comer juntos. Compartir una comida con tu pareja es una forma fácil de fomentar la intimidad y la confianza en la relación. También puede ser divertido para ambos ver si sois capaces de preparar comidas que ambos disfruteis. Como algo de una cocina étnica o cocinar uno de los platos favoritos del otro.
Si esto parece algo que tiene sentido para los dos, considera la posibilidad de dar un paso más añadiendo un poco de vida familiar a la mezcla. Siemp re hay que tratar de mejorar. Puedes invitar a toda la familia para que todos se lleven bien (¡e incluso para que coman juntos!) y al mismo tiempo crear recuerdos que duren mucho tiempo después de que se vayan.
El primer paso para tener sexo fuera del dormitorio es hacerlo divertido. Cuando tienes una relación, no debes tener miedo de probar cosas nuevas, y si tu pareja quiere probar algo nuevo, ¡déjalo! El sexo no tiene por qué limitarse únicamente a los confines de la cama.
Hay muchos lugares en los que las parejas pueden tener su propio pedacito de cielo privado: en los baños públicos, en el trabajo o en la escuela (o en cualquier otro lugar), incluso el simple hecho de caminar por la calle puede dar a alguien la inspiración suficiente para un poco de acción vaporosa. La clave está en asegurarse de que ambas partes están dispuestas a hacer lo que sea. De lo contrario, podría producirse una situación incómoda sin que nadie sepa lo que ocurre a puerta cerrada… ¡o peor aún, que alguien te pille!
El ejercicio es bueno para la salud y puede ayudarle a perder peso. El ejercicio también puede ayudarle a dormir mejor, a sentirse más feliz y a ser más productivo en el trabajo.
Admitir los errores y pedir perdón cuando se hiere a la pareja significa que se admite haber cometido un error. También demuestra que respetas a tu pareja lo suficiente como para preguntarle si está de acuerdo con lo sucedido. Aunque haya sido un error honesto por tu parte.
Esto demuestra que no hay necesidad de esconderse detrás de las excusas o de culpar a otros cuando algo va mal en una relación. Por el contrario, anima a la gente a enmendar las cosas cuando sea necesario para que las cosas vuelvan a la normalidad lo antes posible.
