Los días más cortos favorecen el sexo. Si eres como yo, la idea de tener sexo en un día más corto suena como algo sacado de una película de terror. Pero, en realidad, ¡es genial! Que anochezca antes es algo que hace que acabemos a una hora más temprana en la cama. Sin duda, el hecho de que los días sean cada vez más cortos en otoño e invierno, favorece las relaciones sexuales.
El frío es una gran excusa para quedarse en la cama con tu pareja. También es una excusa para quedarse en la cama con tu pareja y tener sexo, así que si te sientes juguetón, ¿por qué no hacer ambas cosas? El frío puede ser especialmente bueno porque facilita que la gente se desnude sin tener que vestirse primero. Si estás de acuerdo con la idea de quedarte en la cama todo el día a partir de ahora (¿y quién no querría eso?), entonces di que sí cuando alguien te sugiera salir a tomar el aire mañana por la mañana.
Si no es un día nublado, es probable que no tengas ganas de hacer el amor. Y si usted no está de humor para el sexo, tampoco lo estará su pareja. Cuanto menos luz solar haya, más probable será que quieras pasar el tiempo dentro de casa con un libro o un programa de televisión en lugar de salir a conocer gente.
Para algunas personas, el sexo en invierno es mejor que en verano. Esto suele estar más extendido cuando se tiene una pareja de mucho tiempo de relación. Por lo general, en estos casos, se prefiere el otoño y el invierno para los encuentros sexuales. Algunas razones son las siguientes:
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- El verano es caluroso y sudoroso, lo que dificulta las relaciones sexuales sin pasar demasiado calor o sentirse incómodo.
- El verano tiene más probabilidades de ser interrumpido por los niños, el trabajo u otras responsabilidades. Precisamente, aquellas que te impiden tener tiempo para la intimidad con su pareja. Además, también es más probable que salgas a cenar con tus amigos después del trabajo, lo que significa menos tiempo para el otro cuando terminas de trabajar.
- Por el contrario, el invierno puede ser igual de frío en el exterior, pero más acogedor en el interior debido a todas las mantas en la cama y los calcetines gruesos en los pies. En invierno hay menos interrupciones (no hay niños corriendo), así que no hay razón para no desnudarse y divertirse juntos.
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