La anatomía de la vagina suele ser una completa desconocida. Las partes inferiores femeninas ocultas y su funcionamiento interno son una zona misteriosa para un sorprendente número de mujeres. Muchos creen falsamente que el «agujero del pis» y el «agujero de la vagina» son lo mismo. No es de extrañar, dado que las partes femeninas son mucho menos expuestas, sutiles y complejas que las partes masculinas más obviamente expuestas. Sin embargo, lo que se encuentra entre los muslos es más complicado e intrincado de lo que uno podría pensar. La anatomía es compleja: tres aberturas, dos juegos de labios, hinchazones, glándulas, tejido eréctil, músculos y más.
Primero dejemos las cosas claras sobre la diferencia entre la vagina y la vulva. A estas alturas parece mentira que así sea pero estamos ante una geografía que, a menudo, se confunde. Cuando se hace referencia a la anatomía femenina externa visible, la mayoría de las personas hablan incorrectamente de la vagina. En realidad, se trata de la «vulva», dividida por la mitad por una hendidura en la línea media conocida en la jerga médica como hendidura pudenda o hendidura de Venus
La vagina, por otro lado, es el pasaje interno, flexible, cilíndrico y muscular que se extiende desde la vulva hasta el cuello del útero. Sin duda, una elegantísima descripción. La abertura vaginal en la vulva se conoce en términos médicos como introito vaginal. Más al sur está el paisaje entre la vulva y el ano conocido en la jerga médica como el perineo o en términos de argot, «mancha».
A modo de conclusión y de resúmen básico, hemos de recordar que la vulva es externa mientras que la vagina es interna. La etimología nos puede aclarar algunas cosas. La palabra «vulva» se deriva del latín «cunnus». resulta bastante rápidao entender la derivación de la palabra al argot. Sin embargo, La palabra «vagina» se deriva de la palabra latina «vaina». Se trata de una cubierta para la hoja de un cuchillo o espada. Sin duda, un término muy apropiado, ya que ofrece una imagen bastante aproximada a la realidad de su función biológica.
