Los orgasmos femeninos se alcanzan de diferentes maneras. Bien es cierto que, por normal general, son muchas las terminaciones nerviosas y grupos musculares que intervienen en ellos. Sin embargo, resulta especialmente cómodo par la divulgación analizarlo desde una forma analítica como si actuasen de forma independiente.
Los orgasmos intervaginales, del punto G o cervicales son todos orgasmos vaginales. Cualquier orgasmo que ocurre cuando se estimula la pared vaginal interna es un orgasmo vaginal. El punto G se encuentra ligeramente dentro de la vagina. En la pared frontal y la estimulación de esta área es lo que explica los orgasmos vaginales. Los orgasmos del punto G pueden ocurrir con o sin eyaculación femenina.
Algunas mujeres describen los orgasmos vaginales o del punto G como orgasmos profundos e intensos de todo el cuerpo. Muchas mujeres han experimentado orgasmos en el punto G. Suelen decir que estos orgasmos se producen después de una serie de pequeños orgasmos, cuando el pico sexual de la etapa de meseta continúa desarrollándose.
Para algunas mujeres, los orgasmos del punto G pueden ser más poderosos que cualquier otro tipo y algunos pueden describirlos como ondas ondulantes de liberación sexual total. Cuando se experimenta con la eyaculación femenina, los orgasmos del punto G pueden ser muy intensos y agotadores tanto emocional como físicamente. Deborah Sundal, autora de La eyaculación femenina y el punto G cree que los orgasmos del punto G y la eyaculación femenina también pueden curar y ayudar a eliminar traumas pasados.
Los orgasmos femeninos del punto G se obtienen con la estimulación sexual de la pared vaginal. La estimulación se puede lograr a través de la penetración vaginal mediante vibradores o consoladores del punto G, relaciones sexuales con una pareja, usando los dedos, mediante el fisting, así como indirectamente a través del ano durante el sexo anal o el juego.
Es cierto que el punto G, los orgasmos del punto G y la eyaculación femenina se han promocionado seriamente en los medios de comunicación y en la comunidad médica / sexual. Sin embargo, descartar que existan orgasmos en el punto G es negar lo que muchas mujeres hacen y han experimentado.