Figging: sexo y jengibre

¿Conoces el figging? Parece que el jengibre tiene aplicaciones que no todo el mundo conoce. Sin embargo, el desconocimiento, desde luego no es por novedosa, ya que se trata de una práctica que cuenta con más de 3000 años de antiguedad. El figgin es una práctica que, a día de hoy, se incluye dentro del BDSM y su funcionamiento no puede ser más senciillo e intuitivo. Se trata de introducirse bien por el ano o por la vagina una raíz de jengibre.

El origen del figgin se suele situar en la época de la Antigua Grecia. Parece que se utilizaba para meter en vereda a las esclavas más díscolas. En fin, para disciplinarlas. Concretamente, se conseguía mantenerlas inmóviles durante un importante periodo de tiempo debido al escozor que producía. El origen, como vemos, al igual que otro tipo de prácticas sexuales incluidas en el BDSM, como el bondage, tiene un origen algo oscuro.

El área geniral en general muestra una importante hipersensibilidad. De esta manera, la estimulación qeu produce el jengibre es extrema. Además, la raiz provoca un caacterístico picor. Al contato con las mucosas vaginales y/o anales, esta sensación de escozor se transforma en un intenso calor. Algunas personas consideran esta sensación totalmente placentera.

Lo primero para poner en práctica el figging es, por supuesto, asegurarnos de que no somos alérgicos al jengibre. El destrozo que nos podríamos hacer de serlo sin saberlo podría ser de dimensiones colosales. Como preparación previa, tras haber comprobado no tener alergías, es pelar bien la raíz que se vaya a utilizar. Se trata de eliminar por completo la corteza y, además, de enjuagarla con abundante agua.

Hemos de evitar, en todo momento, el contacto con los ojos. Este picor en los globos oculares no resulta nada placentero. Antes de tocarse los ojos, por lo tanto, es necesario haberse lavado los ojos con agua y jabón neutro. Parece que para que el figgin sea aun más intenso es preciso que la raíz esté fría. Por lo tanto, se puede introducir en la nevera una hora antes de su uso. Aumentar este periodo de tiempo no resulta del todo aconsejable.

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