La primera cita es el mejor momento para dar una buena primera impresión. De hecho, es la única oportunidad que tenemos para hacerlo. Sin embargo, para el resto de cosas, es posible que tengamos más oportunidades. Siempre que a la primera cita le siga una segunda cita. De no ser así va a resultar complicado mostrar o descubrir aquellas cosas que aún estén ocultas.
Una de las cosas que podemos hacer en la primera cita es tener sexo. Sin embargo, también es algo que nos puede parecer precipitado hacer tan pronto. De hecho, existen estas dos corrientes de opinión. Hay gente que estima conveninente reservar el sexo para un momento en el que haya un mayor nivel de confianza. Otras personas, en cambio, piensan que si se ha conectado lo suficiente, ¿por qué no tener sexo, aunque sea la primera cita?
Lo primero que siempre hemos de tener presente es el respeto a las ideas propias y a las ajenas. Por supuesto, si una de las dos partes implicadas considera que no es conveniente mantener una relación sexual en la primera cita, no hay nada más que discutir. Por la misma razón, cuando ambas personas están de acuerdo en mantener relaciones sexuales aunque estemos en la primera cita, tampoco hay más que hablar.
Si ambas partes están de acuerdo y la decisión es seguir adelante con la idea de mantener relaciones sexuales, aunque se trate de la primera cita, es imprescindible que mantengamos las prinicipales normas básicas de seguirdad. Por supuesto, el uso de preservativo es totalmente indiscutible. Una vez más, la seguridad es lo primero.
Por otro lado, está la posibilidad que tenemos delante de innovar en materia sexual con una persona que no te conoce a ese nivel. Las posibilidades que esta situación genera son ciertamente ilimitadas. Para ello, sentirse cómodo es fundamental, por lo que es recomendable que paséis un tiempo antes de ir al lío. Si en ese tiempo se dan situaciones en las que ambos os relajéis, mejor aún. Recordamos que la risa es una herramienta absolutamente eficaz para estos asuntos. No dudtes en utilizarla siempre que puedas.
