Mindfulness es una práctica que ha ganado popularidad en los últimos años como una técnica para reducir el estrés y mejorar la atención plena. Sin embargo, ¿sabías que también puede ser útil para mejorar tu vida sexual?
La práctica de Mindfulness en la sexualidad consiste en prestar atención consciente a los pensamientos, emociones y sensaciones físicas durante la actividad sexual. Al centrar tu atención en el momento presente, puedes mejorar la conexión con tu pareja y aumentar la satisfacción sexual.
En lugar de dejarte llevar por tus pensamientos o preocupaciones, la práctica de Mindfulness en la sexualidad te ayuda a estar más presente en el momento y a experimentar el placer de una manera más profunda. Aquí hay algunas técnicas que puedes utilizar para aplicar el Mindfulness a tu vida sexual.
1. Practica la respiración consciente: La respiración es una herramienta poderosa para conectarte con tu cuerpo y reducir el estrés. Durante el sexo, trata de concentrarte en tu respiración y haz inhalaciones y exhalaciones profundas y lentas. Esto te ayudará a estar más presente en el momento y a experimentar una mayor sensación de relajación.
2. Observa tus pensamientos: Durante la actividad sexual, es normal que los pensamientos vayan y vengan. Sin embargo, en lugar de dejar que tus pensamientos te distraigan, intenta simplemente observarlos sin juzgarlos. Al hacerlo, podrás volver a centrar tu atención en el momento presente y en las sensaciones que estás experimentando.
3. Usa tus sentidos: Durante el sexo, trata de prestar atención a los diferentes estímulos que estás experimentando. Por ejemplo, si tu pareja te toca, trata de concentrarte en la sensación de su piel contra la tuya. Si estás besando a tu pareja, presta atención al sabor y la textura de sus labios. Al concentrarte en tus sentidos, podrás experimentar una mayor conexión con tu pareja y una mayor sensación de placer.
4. Sé amable contigo mismo: La práctica de Mindfulness en la sexualidad no se trata de lograr un orgasmo o de satisfacer a tu pareja. Se trata de estar presente en el momento y de experimentar el placer de una manera más profunda. Si te distraes o tienes dificultades para concentrarte, no te juzgues a ti mismo. En su lugar, sé amable contigo mismo y trata de volver a centrar tu atención en el momento presente.