El otoño es una gran época del año. El aire es fresco, las puestas de sol son preciosas y hay menos contaminación lumínica que en otras estaciones. Pero hay algo en el otoño que puede hacerte sentir triste: menos horas de sol, temperaturas más bajas, vuelta a la rutina… A veces parece que estamos pasando por otro invierno.
El otoño es la estación con menos luz solar. El sol se pone antes y sale más tarde durante el otoño que en cualquier otra estación. Esto significa que recibes menos horas de sol que durante otros meses, lo que puede hacerte sentir triste o cansado. Es un fenómeno natural llamado Trastorno Afectivo Estacional (TAE).
El otoño es la estación de las temperaturas más bajas y de los días más cortos. Esto se debe a la órbita de la Tierra en torno al sol, que hace que su eje se incline hacia o hacia fuera (dependiendo de lo lejos que esté el norte o el sur). Cuando esto ocurre, nuestras estaciones cambian: el verano se convierte en otoño y el invierno en primavera.
El otoño astronómico se produce cuando nuestro planeta ha recorrido la mayor parte de su ciclo anual y vuelve a su posición previa al invierno un año más. El hemisferio sur experimenta primero el otoño astronómico, luego lo hace el hemisferio norte, a un tercio de distancia entre ambos, antes de volver de nuevo al territorio del hemisferio norte durante la mitad del invierno (alrededor del 23 de diciembre).
Después del verano, volvemos al trabajo. A la escuela. De vuelta al gimnasio. En definitiva: de vuelta a nuestra rutina diaria: desayunar a las 7 de la mañana, beber café durante todo el día, ver la televisión por la noche y dormir bien cada noche (o no). En otoño, la naturaleza nos invita a frenar y reflexionar. Así que si te sientes triste en este momento, no pasa nada.
La idea de tener menos tiempo para nuestros amigos o seres queridos puede asustar en momentos como éste, pero la realidad es que todos tenemos mucho más de lo que creemos. No hace falta esperar al invierno para tener su propia estación especial.
Hay muchas otras épocas a lo largo del año en las que la naturaleza nos ofrece un respiro de la actividad y el ajetreo (o quizá incluso algunas nuevas oportunidades). El otoño es una de esas épocas: es un buen momento para salir al exterior con amigos a los que les guste la belleza natural tanto como a ti.