Los condones son lo mejor para el sexo seguro. Sin ningún género de dudas. El condón masculino básico es un tubo elástico delgado. A menudo, transparente. Los condones masculinos vienen en diferentes tamaños, formas, texturas, sabores, lubricados y sin lubricar. La mayoría están hechos de látex, pero para las personas con alergias al látex también hay condones hechos de poliuretano o poliisopreno de grado médico.
En el caso de los preservativos masculinos, es muy importante elegir el tamaño adecuado. Los tamaños de los condones varían en longitud. Si el condón está demasiado apretado, puede romperse. Si está demasiado flojo, puede salirse durante el sexo.
Una de las mayores quejas sobre el uso de condones es que los usuarios pierden sensibilidad. Sin embargo, hay preservativos extrafinos hechos para hombres a los que los preservativos normales les resultan demasiado gruesos. Otros condones brindan más movimiento alrededor de la cabeza del pene, lo que también ayuda a estimular más a los adictos a las sensaciones. Y, para las chicas, hay muchos preservativos que convertirán el pene en un cosquilleo francés con varias texturas como acanalado y tachonado para darle más placer. Para chicos y chicas, hay condones de juego de sensaciones que tienen una lubricación estimulante que puede enfriar, hormiguear o calentar.
Para la felación, hay muchos preservativos con sabor que pueden hacer que el sexo oral sea mucho más sabroso. Sin embargo, no es recomendable usar condones de sabores para la penetración ya que muchos contienen glicerina que no son compatibles con la flora de la vagina. Y, aunque es posible que aún no hayan lanzado un condón con sabor a tocino, existe un lubricante con sabor a tocino que es compatible con los condones de látex.
Así que los preservativos no tienen por qué ser aburridos. Piensa en ellos como un objeto de placer adicional para incluir en su arsenal de juguetes sexys.