Acerca de los orgasmos femeninos (parte 2)

Cuando se habla de los orgasmos femeninos, tradicionlmente se separan de pforma analítica todas las componentes. Como si un orgasmo fuese algo que se pueden experimentar solo con una parte del cuerpo. En realidad, estas divisiones no tienen ningún sentido. La realidad es otra. Muy distinta. Las mujeres, cuando tienen un orgasmo lo sienten a través de todo su cuerpo. También son capaces de alcanzarlo a través de la estimulación de todo el cuerpo.

Lo que sí es cierto es que, para poder analizar y comprender determinadas situaciones, la disección analítica, a veces viene muy bien. De esta manera, podemos considerar que un orgasmo del clítoris es provocado por la estimulación del clítoris, ya sea directa o indirectamente. Algunas mujeres disfrutan de la estimulación intensa y directa del clítoris, mientras que a otras les resulta incómodo o incluso doloroso. El clítoris se puede estimular de diversas formas. Incluido el uso de un juguete sexual vibrante, los dedos, la lengua de un amante, el rocío de agua a presión de una faceta, así como indirectamente a través de la penetración vaginal. Este tipo de orgasmos del clítoris suelen ser el primer tipo de orgasmo que experimentan las mujeres cuando comienzan a explorarse sexualmente a través de la masturbación.

Los orgasmos del clítoris a menudo se describen como el tipo de orgasmo de tensión o liberación en el que se estimula el clítoris, se acumula la tensión sexual y muscular, que luego alcanza su punto máximo en el orgasmo y la liberación de esa energía. Los orgasmos del clítoris pueden ocurrir en un área localizada  o la ola de sensaciones orgásmicas y de placer puede extenderse desde la ingle, hacia el vientre y por todo el cuerpo. También, no cabe duda, pueden extenderse de 20 segundos a varios minutos, aunque es poco común que superen un minuto.

La inmensa mayoría de las mujeres  no experimentan el orgasmo únicamente a través de la estimulación vaginal. Muchas mujeres requieren estimulación del clítoris para alcanzar el orgasmo. Sin embargo, esa tasa está cambiando a medida que más mujeres comienzan a descubrir su punto G y cómo estimularlo.

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