El encierro al que nos vemos sometidos durante estas semanas parece que puede causar destacados efectos en las relaciones de pareja. Está bastante claro que la convivencia es la principal causa de ruptura de las parejas. No hay más que echar un vistazo a los datos históricos de divorcios y separaciones. Cada año tienen un importante repunte tras las navidades y tras el verano. Aquellas fechas en las que la convivencia en pareja se hace más intensa, siempre acarrean un mayor número de divorcios y separaciones. Parece lógico que pensar que el encierro que viviemos a causa de la pandemia nos llevará a una situación similar.
Parece que hasta un 20 por ciento de las parejas que están viviendo el confinamiento juntas está avocada a romper su relación tras el mismo. En general, es bastante poco probable que las diferencias surgidas a lo largo de estos días sea la causa principal que motive este tipo de rupturas. Al contrario, lo más común será prevalezca el desgaste previo intensificado por la convivencia intensiva. Una vez más, como nos estamos acostumbrando a oír durante estos días, la suma del virus y las patologías previas no tendrán un resultado positivo.
De hecho, puede que las parejas sean, en el sentido social, algunas de los colectivos más débiles desde un punto de vista emocional y, por lo tanto, algunos de los más dañados. Sin embargo, esto no sucederá con todas las parejas. Ni mucho menos. Que el veinte por ciento romperán, quiere decir que el ochenta por ciento de ellas no lo harán. Sin duda, estamos ante una abrumadora mayoría. Por supuest que esta circunstancia invita al optimismo.
De hecho, la parte positiva de todo esto, en lo que a materia de pareja se refiere, es que un buen número de ellas, no solo superarán la crisis después de haber pasado juntos el encierro, sino que, además, verán fortalecida su relación. Sin duda, estamos ante un fenómeno que se da en este tipo de circunstancias. Las situaciones extremas ponen a prueba las relaciones y, en unos casos, hacen que estas se acaben pero, en otros, las hacen más fuertes.
