¿Por qué es tan popular el masaje erótico? Seguro que muchos de vosotros tenéis una respuesta clara y concreta a esta pregunta. ¿De qué va el masaje erótico? Algunas personas, a estas alturas, todavía se hacen esta pregunta. ¿Te parece un masaje erótico una evasión? Vamos a tratar de dar una visión particular que contesten a algunas de estas preguntas.
Hay que reconocer la popularidad del masaje erótico. Sin ninguna duda es una de las prácticas sexuales más practicadas. La mayoría de las parejas sexuales estables ponen en marcha, con relativa frecuencia, este tipo de práctica. Ya sea como juego previo al coito o, en algunas ocasiones, como una forma de disfurtar del sexo de una forma diferente.
La popularidad del masaje erótico es creciente. Además, cada vez se utilizan más elementos en este tipo de práctica que tratan de ampliar la experiencia a otros ámbitos sensoriales. Así, por ejemplo, se pueden introducir velas aromáticas que estimulen el olfato. Otra forma de introducir elementos que estimulen el resto de los sentidos es, por ejemplo, introducir aceites de masaje. Además de aportar textura al tacto suelen proveer también detalles relacionados con el olfato.
Otra buena idea para hacer aún más atractiva una sesión de masaje erótico es jugar con la iluminación. Que haya poca luz siempre es una buena idea. No la oscuridad absoluta. Simplemente disminuir la intensidad lumínica. Si además lo hacemos con elementos que consigan aportar un toque de color, el resultado puede resultar de lo más excitante.
Si somos capaces de hacer que el entorno juegue a nuestro favor en una experiencia tan íntima como esta, lo más probable es que consigamos disfrutar de una experiencia etraordinariamente sensual. Es preciso poner de manifiesto que no siempre es necesario que tras el masaje sensual prosiga una sesión de sexo convencional. Al contrario.
La idea del masaje sin más es muy excitante. Tanto que, muchas veces, sin pretender a priori acabar el masaje con un coito, el camino nos conduce, sin buscarlo, hacia él. Cosa que puede resultar aún más excitante. Los caminos a los que nos lleva el mundo del masaje erótico son inexcrutables.