La segunda de las fases que comoponen la respuesta sexual masculina es la conocida como fase de excitación. Es a lo largo de este periodo cuando comienza la erección, que se produce gracias a la situación de relajación que alcanzan los cuerpos cavernosos del pene que, de esta manera, permiten que se llenen de sangre y, así, aumentar el grosor y la loingitud del pene. La bolsa escrotal también se contrae y los pezones se endurecen.
La fases de meseta es aquella fase de la respeusta sexual masculina en la que la tasa cardíaca y respiratoria continúan con el crecimento iniciado en la fase anterior a la vez que comenzamos a sufrir rubor en el pecho y en la cara. EL glande continúa creciendo y comienza a excretar una pequeña cantidad de líquido preseminal que limpia los conductos del aparato reproductor
Después, llegaremos a la fase final denominada orgasmo. En esta fase, la tasa cardiaca y respiratoria alcanzan los máimos niveles. La sensación de placer se dispara y provoca contracciones rítmicas en la zona genital acompañada de la expulsión de esperma. Los músculos del ano también se contren rítmicamente.
La última de las fases de la respuesta sexual masculina es la resolución. Es el momento en el que la sangre acumulado vuelve a su lugar, por lo que desaparece la erección, el escroto vuelve a su estado reslajado y los testículos se acomodadn en su posición habitual.