La poderosa sexualidad humana es realmente asombrosa. Sin dudad, el poder de la sexualidad radica en la cantidad de energía que es capaz de generar. En realidad, todo en el mundo se compone de energía en movimiento. Podemos encontrar este camino intenerante de la energía en el interior de las células o en la lejanía del universo. Pero todo resulta ser energía en movimiento. La cantidad de forma qque toma esta energía es ilimitada. En aprendenr a manejar esa energía es en lo que se nos va la mayor parte de nuestra vida. La importante parte de energía que compone la poderosa sexualidad humana es, sin duda, una parte importante de esta búsqueda.
Que la poderosa sexualidad humana sea capaz de canalizar la cantidad de energía sexual que se genera a nuestro alredeor puede llegar a ser uno de los retos más importantes, si de lo que se trata des de encontrar el equilibrio emocional neceario para alcanzar nuestros umbrales de felicidad. Sin duda, el poder del sexo es tal que a veces la pregunta es por qué el sexo es tan poderoso como para llegar a crear vida pero, también, tan miserable como para destruirla por completo.
No cabe duda de que una de las cuestiones a tener en cuenta es el aprendizaje sobre el control del cuerpo. Manejar nuestro propio ser con elegancia y confianza en nosotros mismos, de una manera especial en lo referente a nuestra sexualidad, es imprescindible apra incrementar nuestros niveles de satisfacción y de placer sexual. Volviendo al asunto que nos ocupa, el sexo no deja de ser un baile de energías que se traduce en placer, diversión, amor, autestima, confianza, pasión y buen número más de variables que resultarían imposibles de enumerar.
Tan importante resulta la posderosa sexualidad humana que termina por ser un aspecto sesncial de la creatividad del ser humano. El territorio sexual que, de forma genérica, se nos plantea delante a quienens estamos dispuestos a verlo, está compuesto por misterio, por creencias, inlcuso por prejuicios, pero s hay algo que abunda sobremanera, sin duda eso es la energía que fluye a nuestro alrededor.
