Parece que los hombres son capaces de eyacular más semen cuando su pareja es nueva. Efectivamente, por extraño que parezca, así es. Un hombre, cuando lleva una relación de pareja estable eyacula menos cantidad de esperma que cuando acaba de conocer a su pareja sexual y mantienen relaciones sexuales con ella. Para que esto sea así, parece que, una vez más, hemos de tener en cuenta la lucha por la supervivencia de la especie. Pero no sólo la cantidad es considerablemente mayor sino que, además, y por si esto fuera poco, su capacidad de movimiento, así como la velocidad que alcanza el semen, también resulta considerablemente superior.
El último estudio desarrollado por al prestigiosa Universidad de Florida es el responsable de semejante conclusiones respecto al semen masculino. En resumen, la má significativa, sin duda, es l que aforra que cuando los hombres mantienen encuentros sexuales con mueres diferentes, la primera vez que esto sucede, la eyaculación que producen es mucho más intensa, alcanza una mayor velocidad y, además, tiene mucho mayor calidad.
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores seleccionaron una muestra compuesta por 23 hombres heterosexuales de edades entre los 18 y 23 años de edad. todos ellos fueron sometidos a diferentes pruebas. Una de las pruebas más significativas del estudio consistía en la realización individual de una masturbación en cada sesión, a la vez que se proyectaba una película porno concreta. Así, los seleccionados llegaron a proporcionar 7 muestras de semen en la primera semen. En 6 de las 7 películas, la actriz protagonista era la misma. Sólo en una de ellas aparecía una actriz diferente.
La cantidad de semen que cada uno de los hombre facilitó experimentaron un importaren crecimiento tanto en el primer día de la prueba, donde la actriz luego repetida se encontraba a ellos por primera vez, y posteriormente, cuando apareció la actriz desconocida apea ellos Según las conclusiones a las que llegaron los investigadores que se encargaron del estudio, los hombres tratan de asegurar la existencia de la especie eyaculando, de forma totalmente involuntaria, una mayor cantidad de esperma cuando aparece una nueva mujer y con ella, una nueva posibilidad de buscar descendencia.