La sexualidad masculina y femenina es muy diferente, por tanto, las diferencias entre los orgasmos de hombres y de mujeres también lo son. Entre los orgasmo masculinos y femeninos podemos encontrar curiosas similitudes pero sobre todo, grandes diferencias. Los orgasmos femeninos y masculinos no son iguales. La primera diferencia, evidentemente, es quién lo tiene. Pero no es la única. A continuación, algunas de sus más significativas diferencias.
La duración del orgasmo. Normalmente, el orgasmo de la mujer dura más que el orgasmo del hombre. En promedio, el orgasmo de la mujer puede ser unos catorce segundos más largo que el de un hombre. Sin embargo, los hombres se excitan más rápidamente que las mujeres.
Entrar en trance. Los centros nerviosos del cerebro son responsables de la regulación de las emociones apagadas. Cuando una mujer llega al orgasmo se sumerge en un profundo trance. Algo parecido les sucede pasa para los hombres, pero con un nivel de intensidad mecho menor, lo que hace que este punto sea también una importante diferencia.
El tiempo de recuperación. En la mayoría de los casos, los hombres tienen la necesidad de descansar inmediatamente después de llegar a un orgasmo. Sólo una vez recuperadas las energías pueden continuar de nuevo. Las mujeres, sin embargo, se recuperan de la experiencia mucho más rápido y, debido a esto, pueden tener orgasmos en rápida sucesión.
La somnolencia. Un orgasmo libera oxitocina en el cuerpo de ambos sexos. Esta sustancia química induce somnolencia en los hombres de dos a cinco minutos después de haber sido liberada la sustancia. Sin embargo, en las mujeres esto no sucede así hasta, por lo menos, acaecidos 30 minutos desde la liberación de la sustancia. En cambio, su deseo de afectividad aumenta, lo que lleva a la necesidad de abrazar y hablar, pero no de dormir. Si eres un hombre que se se siente mal por haberse quedado dormido demasiado rápido después del sexo, no debes sentirte demasiado culpable. Es difícil luchar contra la química.