Según los psicólogos, la falta de seguridad personal se refleja también en la cama. ¿Qué podemos hacer para mejorarla?
No hay confianza sexual sin confianza en nosotros mismos
Para el 83 % de los encuestados, la confianza sexual pasa por la satisfacción de la pareja. La confianza sexual no es fácil de definir desde un punto de vista absoluto. Mucho menos aún en la práctica. Según este sondeo, la confianza sexual depende del placer del cónyuge. Pero es sobre todo un intercambio. «La confianza sexual en una pareja es saber lo que le gusta al otro, y ser capaz decirle a al otro lo que nos gust «, según afirma Savia Maël, terapeuta especializada en sexología. Al principio de una relación, descubrimos los placeres del otro, sus deseos. También su cuerpo. Aprendemos a conocerse mutuamente a partir de los pequeños juegos sexuales. Son una serie de etapas las que van a construir las bases de la armonía sexual de la pareja.
Ser deseable pasa por la confianza en sí mismo
Descubrir nuestra propia intimidad por primera vez puede despertar angustias o malos recuerdos entre las personas que no están conformes con su cuerpo o que son muy tímidas. Cuando hacemos el amor nos desnudamos, nos exponemos en toda nuestra vulnerabilidad. Por ello es importante confiar en el otro. Pero si no tenemos confianza en nosotros mismos, ¿podremos confiar plenamente en nuestro cónyuge? Evidentemente no. Para encontrarnos deseables, hay que tener un mínimo de confianza en sí mismo y en nuestra capacidad de ser deseados. Si no nos gusta nuestro cuerpo, difícilmente encontraremos placer.
Confianza sexual: descubramos nuestra sexualidad
¿Cómo olvidar nuestros defectos? Podemos por ejemplo examinarnos delante del espejo: “Tengo un pecho espectacular»,»Mis curvas son sensuales», “tengo las piernas bien torneadas”, “no tengo tableta, pero tampoco soy un cúmulo de michelines”. Entonces le pedimos a nuestra pareja que lo haga por nosotros. «Somos guapos», “tenemos un tipo más que aceptable», » tenemos buen culo”, tenemos buenos pechos». Tornaremos nuestros complejos en ventajas y en objetos de deseo. Nos tranquilizará y nos dará confianza. Pero esto puede no bastar. En ese caso, el trabajo personal con un psicólogo nos hará darnos cuenta de nuestros valores.
Tener confianza en sí mismo es una de las claves para nuestra confianza sexual.
Pero, a menudo, descuidamos un punto: La búsqueda del placer a dos, en primer lugar es egoísta. Sin encontrar el «yo» sexual, no podemos ir hacia el otro. No hay 36 soluciones para esto. Para poder gozar, debemos saber lo que nos hace gozar. En definitiva, Tenemos que ocuparnos de nosotros mismos.. Tenemos que buscar lo que nos excita y practicar la masturbación. Encontraremos nuestro punto G y después de eso, vamos a mostrarle el camino a nuestra pareja para disfrutar de ambos.