La evolución de los conceptos de género es algo imparable en nuestra sociedad. La sociedad puede ver y entender los roles de género de muchas maneras. Por ejemplo, la mayoría de las sociedades ven el género como algo fijo para hombres o mujeres; esto significa que si has nacido con genitales masculinos, siempre serás visto como un niño/hombre, mientras que si has nacido con genitales femeninos, todo el mundo te verá como una niña/mujer; no hay forma de evitarlo a menos que te hayas sometido a una cirugía de reasignación de género . Sin embargo, otras sociedades no tienen normas de género tan estrictas como éstas; creen que tanto hombres como mujeres tienen los mismos derechos independientemente de su sexo asignado al nacer .
Los roles de género se basan en diferencias biológicas entre hombres y mujeres, pero también están influidos y definidos culturalmente. Los roles de género son una construcción social que puede cambiar con el tiempo a medida que cambia la sociedad o la cultura en la que se vive.
La religión puede desempeñar un papel en la definición de los roles de género para las personas que siguen esa religión; sin embargo, no todas las religiones definen los roles de género de la misma manera. Por ejemplo, algunas culturas promueven el ascetismo mientras que otras promueven el hedonismo.
Es importante reconocer cómo influye nuestra cultura en nuestras percepciones de hombres y mujeres para cambiar las actitudes hacia la igualdad en nuestra sociedad actual. Los roles de género no son fijos; se basan en diferencias biológicas entre hombres y mujeres, pero también están influidos culturalmente y definidos por la sociedad. Es crucial comprender cómo los roles de género afectan a la forma en que nos vemos unos a otros como individuos, especialmente cuando hablamos de prejuicios, discriminación o estereotipos de género.
El género es un concepto complejo, con muchas capas. Los roles de género son una construcción social en la que pueden influir la biología y otros factores como la cultura, pero no son estáticos. A medida que nuestro mundo cambia, también lo hacen los roles de género; éstos cambian con el tiempo y varían de una cultura a otra. Para crear un mundo mejor para todos, es importante reconocer la complejidad del género y trabajar juntos en la creación de comunidades más inclusivas para todas las personas.