Si alguna vez te has preguntado por qué te sientes atraído sexualmente por alguien, probablemente sea por su aspecto o su personalidad. Pero esto no es cierto para todo el mundo. Algunas personas sienten atracción sexual después de pasar sólo unos minutos con alguien, aunque no hayan visto su cara antes.
La atracción sexual no parece lógica a primera vista porque podemos ver las consecuencias negativas de sentirnos atraídos sexualmente por alguien que no coincide con nuestras expectativas (como ser rechazados) o sentirnos avergonzados por nuestro propio comportamiento frente a los demás (como cuando nos besamos accidentalmente con alguien). Sin embargo, hay muchos beneficios asociados a sentirse atraído románticamente por otra persona: Te acercas emocionalmente; tu relación mejora en términos de comunicación y confianza; y aunque estos beneficios no parezcan obvios de inmediato, realmente se acumulan con el tiempo.
El primer paso para entender la atracción sexual es darse cuenta de que no se trata sólo de la apariencia de alguien. La atracción tiene que ver con la forma en que alguien te hace sentir. Tiene que ver con la forma en que te hace reaccionar el cuerpo y también con la forma en que te hace reaccionar la mente (y esto puede ser tan importante o más que la forma en que alguien te hace sentir el cuerpo).
La atracción tiene que ver con las emociones, tanto las positivas como las negativas. Cuando nos interesamos por alguien sexualmente, a menudo hay fuertes sentimientos de atracción en juego: excitación, deseo, pensamientos lujuriosos sobre ellos… ¡incluso amor! Pero a veces estas cosas no son siempre obvias. A veces la gente se enamora durante semanas o meses antes de darse cuenta de que se debe sólo a su atracción física, o viceversa.
La atracción sexual es diferente a que alguien te guste como amigo o a que te enamores de alguien. La atracción sexual tampoco es lo mismo que estar enamorado de alguien.
La atracción sexual puede definirse como el sentimiento de deseo sexual por otra persona, y a menudo implica sentimientos de deseo y excitación hacia una persona concreta. Es importante tener en cuenta que hay muchos tipos de sexo. Algunos implican placer físico mientras que otros no.