¿El sexo alivia el estrés? La respuesta es un poco frustrante, ya que todo depende de lo que te estrese y de tu relación con el sexo y el placer en general. Porque el sexo no se trata solo de sexo, y el estrés es multifacético. Así que, si buscas una respuesta sencilla a una pregunta compleja, este no es tu lugar.
La neurocientífica y terapeuta sexual Dra. Nan Wise habla sobre los muchos beneficios emocionales del sexo. Entre ellos, el alivio del estrés y el aumento de la productividad. Dos objetivos que la mayoría de nosotros compartimos en nuestro mundo cada vez más globalizado y con notificaciones en todo momento. Metas que parecen cada vez más esquivas, ¿verdad?
La evidencia de que el sexo reduce el estrés se puede encontrar no solo en el trabajo de la Dra. Nan y en importantes investigaciones, sino también en anécdotas cotidianas. Bastantes personas sienten que el sexo es crucial para relajarse. Personas que necesitan compartir el enredo sexual de sus cuerpos, mentes y, a veces, corazones, con los de su pareja, para desestresarse.
Si te inclinas por esta opción, la respuesta a la pregunta es un sí. Porque el sexo que nos hace sentir bien libera neuroquímicos importantes, entre ellos la dopamina y la oxitocina. Estas hormonas para sentirnos bien no solo nos hacen sentir más felices, sino que también nos ayudan a vincularnos con nuestra pareja sexual. Esta es en parte la razón por la cual la respuesta a por qué el sexo causa apego emocional tiene que ver con las hormonas.
Una vez que hayas experimentado el efecto reductor del estrés del sexo, es más probable que lo anheles la próxima vez. Algunos se sienten más amados cuando reciben una lluvia de elogios. Otros se enamoran de nuevo cuando su pareja cocina su comida favorita. Pero para algunos, no hay acto que resulte en mariposas más grandes que el sexo mismo.
Hay algo acerca de sentirse deseado y necesitado sexualmente, que triunfa sobre todo lo demás. Y cuando nos sentimos amados a través del sexo, los niveles de cortisol disminuyen naturalmente y el estrés desaparece.
Pero para que podamos encontrar que el sexo reduce el estrés, necesitamos tener una relación sin estrés con él. Porque incluso si el sexo libera hormonas que nos hacen sentir bien y nos hace sentir amados, no es un hecho si pensar en el sexo causa estrés.