Hay juegos que no deberías jugar. Imaginemos una situación hipotética. Has vencido las probabilidades y has conseguido una relación. La química está ahí. Estás teniendo largas conversaciones y ocasionalmente, cuando accidentalmente te tocas, saltan chispas entre vosotros. Esta es la fase de luna de miel de una relación floreciente. Se necesita trabajo para construir una relación sana. Muchas veces, hacemos el trabajo equivocado y arruinamos nuestras relaciones antes de que tengan la oportunidad. Algunos de nosotros podemos tener miedo cuando la relación comienza a ponerse demasiado seria. Algunos de nosotros incluso podemos autosabotear la relación para protegernos del daño. SIn duda un juega que no deberías jugar.
Este es un patrón de comportamiento que puedes romper. Puedes dejar de trabajar más duro jugando juegos que causan problemas en la relación. Los juegos conducen a cuñas que bloquean el crecimiento en una relación. La gente literalmente se ha alejado unos de otros debido a sus interpretaciones del significado de los juegos que la gente juega. En su lugar, respira profundamente y practica una forma de comunicación que haga que la otra persona se sienta poderosa. Físicamente y emocionalmente. Tal poder impulsa la atracción que hay entre vosotros.
Si una persona se siente atraída por ti física y emocionalmente, no hay necesidad de jugar. O este podría ser tu último primer beso. Imagínate permitirte estar felizmente involucrado con esta persona a medida que pasa el tiempo. Debes encontrar una manera de mantener el interés en el futuro lejano. No tengas miedo de esto. No lo arruines con juegos. Deberíais estar haciendo lo mismo. Por lo tanto, satisfaciendo sus necesidades.
Por ejemplo, sé fuerte y bromea con tu incipiente parej. Buscad desafíos y aventuras en lo que hacéis juntos. Si sois inteligentes, discutid un poco, pero no constantemente. Las bromas pueden ser divertidas e informativas. Hay una diferencia entre confrontación o desacuerdo y broma. En lugar de parecer discutidor, parecerás fuerte y atractivo. Si sigues en la misma línea, debes encontrar ese equilibrio perfecto con la tensión en la relación. En definitiva, si tu nueva relación promete, no juegues a cosas que te puedan alejar de que prospere.