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La desescalada y la nueva normalidad

Ha comenzado la desescalada hacia lo que las autoridades han venido en denominar «la nueva normalidad». Se trata de un plan para, de forma progresiva, ir abandonando el confinamiento al que la pandemia mundial nos ha sometido. Este plan de desconfinamiento progresivo llevará diferentes ritmos en localidades con diferentes realidades a este respecto. Estos diferentes ritmos irán en función de las diferentes situaciones sanitarias y epidemiológicas. Parece que la intención, si todo va bien, es que la desescalada se extienda hasta finales del mes de junio.

No hemos de olvidar que en España la economía está muy vinculada al turismo y a los servicios en general. De esta manera, se trata de estar dispuesto a enfrentar con garantías la temporada de verano. Sin duda, de poder ser así, estaríamos ante un importante empujón en lo que a la reactivación económica se refiere.

La desescalada será asimétrica. El núcleo territorial que se utilizará para definir las diferentes fases serán las provincias y las islas. Desde el pasado 4 de mayo El Hierro, La Gomera, La Gracios y Formentera entraron directamente en la fase 1. Mientras el resto de islas y provincias del Estado español continúan en la fase 0 o fases de proeparación para la desescalada

Los indicadores que se tendrán en cuenta para decidir sobre el paso a la siguiente fase serán las siguientes:

Respecto al calendario de aplicación de las diferentes fases establecidas, aunque no se han fijado, de momento, fechas concretas y determinadas, sí que existe un calendario aproximado. Entre cada una de las fases habrá de transcurrir un mínimo de dos semanas. Solo se producirá un avance en la fase de ser positivos cada uno de los indicadores establecidos.

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