La Covid-19, además de un gran dolor y una profunda crisis de salud pública y económica, está generando, incluso a estas alturas, un buen puñado de dudas. Muchas de ellas, se han ido aclarando a través de las autoridades sanitarias a lo largo de esta interminable pandemia. Algunas, especialmente las que implican relación entre la Covid-19 y la sexualidad, sin embargo, no han sido suficientemente aclaradas. Al menos, no se han divulgado con tanta intensidad como otro tipo de dudas relacionadas con la enfermedad causada por el coronavirus. Así que vamos a tratar de poner nuestro granito de arena en este sentido.
Probablemente, la duda más extendida en cuanto a la relación entre la Covid-19 y la sexualidad sea si se puede propagar a través de las relaciones sexuales. Al menos esa es la percepción que tenemos en esta redacción. El virus que nos ocupa se propaga, principalmente, de persona a persona. eso está clarísimo. Lo hace a través de las micropartículas que expulsa la persona infectada cuando tose, estornuda o habla muy cerca de otra. Se trata de unas minúsculas gotitas que podrían caer en la boca o en la nariz de las personas que están cerca.
También cabe la posibilidad de que sean, directamente, inhaladas y que lleguen a los pulmones. Dado que el beso es una práctica común durante las relaciones sexuales, y que el virus se transmite a través de la saliva, se puede afirnar que besarse es la actividad más arriesgado dentro del encuentro sexual.
También, cabe destacar que el hecho de tocar superficies contaminadas es otro modo de transmisión del virus y, por lo tanto, de la Covid-19, por lo tanto, el lavado de las manos antes y después de cualquier relación sexual es absolutamente primordial. Como para cualquier otra actividad. Cosa que deberíamos cumplir rigurosamente. Para el sexo y para todo lo demás. No hay que dejar de recordarlo. Una tarea muy sencilla que evita muchos contagios.
Sin embargo, no existe ninguna evidencia de que la Covid-19 pueda ser transmitido por vía vaginal o anal, aun en el caso de que el coronavirus estuviera presente en las secreciones vaginales o en el semen. Por lo tanto, a día de hoy, las autoridades sanitarias no pueden hacer ninguna declaración concluyente sobre la seguridad de la actividad sexual, en lo relacionado con este aspecto.
De lo que sí hay pruebas absolutamente concluyentes es de la transmisión oral-fecal de la Covid-19. Esto, evidentemente, implica que cualquier práctica de este tipo puede suponer un importante riesgo de infección. Por lo tanto, no resultan recomendables. Al menos sin la seguridad de no estar contagiados.