Que la pornografía es algo totalmente extendido y generalizado en nuestra sociedad es un hecho. En realidad, siempre fue así. Pero la aparición de Internet ha terminado por hacerlo aún más visible. Debemos tener muy claro que la pornografía no es la realidad. Se trata de una visión distorsionada del sexo para procurar placer al observador. Si sabemos entender esto, el porno puede convertirse en un aliaod muy eficaz para nosotros.
La comunicación en materia sexual suele siendo uno de los principales problemas de la mayoría de las parejas estables. Hay mucha gente aún a la que le da pudor hablar abiertamente sobre sexo. Ni que decir tiene que aún más si es para abrirse a nuevas experiencias. Precisamente es en este contexto en el que la pornografía puede ayudarnos de una forma muy especial.
La pornografía muestra a personas practicando sexo de una forma clara y explícita. ¿No es así? Sin duda, a la mayoría de las personas, esto les provoca excitación sexual. Aquellos que tienen determinados problemas para fantasear ceon el sexo o que les cuesta comunicar sus fantasías les puede ayudar de una manera especial. Sin duda, en el cine porno podemos encontrar las imágenes perfectas que ayuden a nuestra imaginación a dejarse llevar.
La forma en que consumimos cine pornográfico, por supuesto, han cambiado. En realidad han cambiado casi todos los hábitos de consumo y este no podía ser diferente. Los cines X o las cintas de vídeo VHS pasaron a mejor vida. La gran red de redes hace que el acceso sea mucho más sencillo y privado de lo que lo era hace no tanto tiempo. Nuestra privacidad, por lo tanto, está a salvo.
Además, la pornografía nos acerca a determinadas experiencias sexuales que, probablemente, tengamos complicadas de vivr de otra manera. Son muchas las fantasías sexuales que tenemos en la cabeza y no muchas las que pudieran cumplirse de una forma sencilla. El cine porno es una buena manera de vivir esa experiencia de alguna manera. Además, no existe una mejor manera de acercarnos a cumplir una fantasía sexual que tener la posibilidad de visualizarla.