El instinto sexual humano aparece tan pronto pasa cerca de nosotros un hombre o una mujer que nos atrae sexualmente. En ese momento todo pasa a un segundo plano. El hombre es el animal con el isntinto sexual más desarrollado de todos. Decir que en un caso así actuamos como animales es totalment inexacto. En realidad, los animales nuestran su instinto sexual en época de reproducción. En nuestro caso, en cualquier época del año.
El instinto sexual de cada persona es diferente al de las demás. También en esto cada uno tenemos una identidad propia que nos hace únicos. La formación de nuestra identidad a nivel de instinto está conformada por un buen número de variables. La educación, la cultura propia de nuestra sociedad y el tipo de vida que llevamos son algunas de estas variables. Pero hay muchas más.
La divergencia cultural está muy presente en lo que al tema que nos ocupa se trata. En determinadas culturas, identidades instintivas comunes y que pasan desapercibidas en unos lugares, pueden considerarse prácticamente una perversión. Si bien, como ya sabemos, no hay peor perversión que la inhibición sexual. Cuando esta se produce la insatisfacción sexual resulta un hecho. Estas situaciones, además de causar un profundo empobrecimiento interior pueden llegar a ser unas circunstancias nocivas para la persona que las sufre.
Las zonas erógenas son absolutamente imprscindibles en la aparición del instinto sexual humano. Las primeras manifestaciones aparecen desde la primera infancia y, en condiciones normales, nos acompañan a lo largo de toda nuestra vida. La represión cultural en algunos lugares puede causar que la relación erótica de un individuo consigo mismo pueda ser reprimida en las primeras fases. Aquellas que, por otro lado, se convierten en vitales para alcanzar el autoconocimiento necesario para valernos en la vida más adelante.
El instinto sexual está presente tanto en hombres como en mujeres prácticamente desde el nacimiento. Eso es indiscutible. Sin embargo, su aparición a nivel de relación con el resto del mundo suel aparecer a partir de la pubertad Sin embargo, para esto tampoco hay una regla exacta. Cada persona puede presentar diferencias también en este sentido.