EL masoquismo no es una cosa de ahora. Durante toda la Historia de la humanidad, las sociedades han estado formadas por personas con diferentes hábitos sexuales. Por supuesto que el masoquismo ha estado representado. Sin embargo, parece que hasta el siglo XIX no ha cobrado la repercusión que merece. De hecho fueron los escritos de los escritos de Sacher-Masoch el que nos ayudó a descubrir la gran importancia que supone para la sexualidad humana. Y hemos de agradecérselo.
Como sabemos, el masoquismo es la conducta sexual con al que se consigue placer sexual a través del dolor físico o psíquico. Apenas existe literatura al respecto hasta finales del siglo XIX. Parece que el romanticismo y puritanismo propios de otras épocas no aceptaba la existencia de hábitos sexuales que proporcionasen placer sexual a través del sufrimiento.
En la actualidad, gracias, especialmente, al cine y a los medios audiovisuales en general, el protagonismo que ha tomado el masoquista entre las opciones sexuales posibles, es destacado. No hay más que repasar la cantidad de películas de cine convencional que abordan esta temática. La cantidad es enorme.
Pero volvamos al barón Léopold Von Sacher-Masoch. Nació en el año 1836. Por lo que parece, su bisión del sexo no era excesívamente romántica. Gracias a uno de sus libros hemos podido descubrir y entender una forma especial de erotismo. Como decíamos al prinicipio, esta práctica siempre ha estado muy extendida en el mundo entero. Masoch lo que hizo fue revelar en sus obras la realidad del masoquismo.
Sus novelas más representativas son “La Venus de las pieles” y “La mujer divorciada”. En ellas se narran las aventuras sexuales que el propio autor mantuvo con Fanny von Pistor y Anna von Kottoviz. Como se puede imaginar, la sociedad de su época no estaba preparada para llo y el escándalo fue notable.
El término masoquismo está ligado a a una serie muy concreta de actividades y eróticas perversas. Aunque Masoch se encargó de negar la práctica de estas conductas perversas, fue inevitable que su nombre quedase ligado para siempre al masoquismo.
“La Venus de las pieles”, “Los caballeros azotados”son los títulos de otras obras suyas en los que las intenciones del contenido se aprecian de forma bastante perceptible.