Los juegos eróticos por teléfono están a la orden del día. ¿Todavía no has probado esta nueva fuente de excitación? Puedes hacer sexo telefónico con tu pareja como una práctica sexual más. Es una bunea forma de reactivar la pasión. Por supuesto, también de conseguir placer aunque estéis separados. El teléfono puede ser una buena ayuda en estos casos.
Si quieres creerte el sexo telefónico, tienes que hacerlo en un ambiente sexy. Enciende velas. Poner música suave es una buena idea. Sírvete una copa de vino y marca su número de teléfono.
Si necesitas ponerte un poco a tono antes, mira una peli erótica o lee un relato. Hay muchas webs que te pueden ayudar en esto. Ya sabes. Cuando empieces a excitarte, corre. Coge el teléfono y comienza a transmitir tus sensaciones.
Para que vaya abriendo boca, antes, envíale un sms muy explícito respecto a tus intenciones. Después, incluso una foto en la que se ven atus preparativos.
Por teléfono puedes tener una conversación sexual libre de prejuicios. Te animamos a explicar todo lo que a veces se te pasa por la cabeza pero no le dices a la cara. Si te cuesta hablar «sucio», actúa. Métete en el papel.
El sexo telefónico es como el virtual. Puedes ser quien quieras. Tus erecciones pueden ser increíbles. Ella puede hacer las posturas más inverosímiles. Es la mejor forma de hacer realidad las fantasías sexuales mutuas sin pisar el resbaladizo terreno de la realidad.
Si quieres más realismo en el sexo a distancia, utiliza una web cam. Puedes utilizar cualquier de las aplicaciones de videollamadas. Será muy excitante veros y hablar en tiempo real. Es una buena idea comenzar por teléfono. Después, una vez ha subido el nivel de excitación, puedes pasar a la webcam.
En el sexo telefónico hay dos técnicas infalibles. Una es recorrer lascivamente su cuerpo. Nunca falla. Resulta excitante tanto para uno como para otro. La otra técnica es describir lo que tú estás haciendo con el tuyo. Tampoco suele fallar. Explicar paso a paso cómo te masturbas, qué sientes, en que piensas mientras lo haces.