No hay una mujer en el mundo que no haya fantaseado con penetrar en lugar de ser penetrada. El simple hecho de notarse entre sus propias piernas un objeto con capacidad eréctil para utilizarlo en la búsqueda del placer sexual propio y ajeno ya resulta especialmente gratificante para muchas mujeres. Hay mujeres que, desde bien jóvenes, han fantaseado con la idea de penetrar a su compañero de juegos sexuales por el culo. La excitación sexual puede crecer de forma exponencial al comprobar la sensación de poder que da el hecheo de dominar la situación y tener al compañero sexual rendido y a nuestra disposición.
Como cualqueir otra fantasía, muchas mujeres querrán limitar esta escena exactamente a esto, al terreno de las fantasías sexuales no cumplidas. Sin embargo, otras, con diferente criterio, querrán dar el paso de la mera excitante fantasía sexual a probar los efectos que produce su puesta en práctica. Aquellas mujeres que no quieran conformarse con la fantasía y que, además de disfrutar fantaseando, quieran hacerlo experimentando, basta que cuenten con el trío mágico que les permitirá penetrar en lugar de ser penetradas, o además, un dildo, un arnés y la complicidad en este asunto de su pareja sexual.
Y contra lo que pudiera imaginarse la mayoría de las personas que se planteen esta cuestión, los hombres que, a regañadientes aceptan cumplir la fantasía erótica de su pareja, por norma general, se sienten bastante satisfechos. Vamos, que al prinipio poenen alguns pegas, después terminan aceptando y, finalmente, suelen disfrutar más que nunca con una experiencia sexual. CIerto es que ,as horas posteriores, a veces, no son demasiado agradables. Pero la experiecia así, resulta ser algo especialmente exitante y totalmente recomendable.
Las recomendaciones para comenzar a penetrar en lugar de ser penetrada, o además, son pocas. Extremar la precaución y hacer todo muy poco a poco, con la lubricación adecuada y sin hacer el bruto. Si hay que extremar las precauciones, más hay que extremar la higiene. Nunca se deben compartir dildos. Cada uno ha de tener el suyo para evitar trasladarnos infecciones y, como siempre y por el mismo motivo, debemos evitar ir del ano a la vagina.