Todoas en alguna ocasión hemos atravesado algunas situaciones violentas en la cama. Todos hemos pasado por alguna circunstancia que nos haya hecho sentirnos avergonzados por alguna causa de lo más imprevista en la mayoría de los casos. No hay nadie que se haya librado de algún imprevisto que le haya puesto en evidencia delante de su pareja circunstancial o temporal. Todos hemos caído a este tipo de situaciones. Y es que el azar cabrón, el destino este chungo que quiere mofarse de ti en tu cara, no descansa para nadie. Las situaciones violentas en la cama son algo que, no sólo ya has vivido sin que, casi con toda seguridad, volverás a vivir en algún momento.
Desde luego, las situaciones violentas en la cama más desagradables son las que tienen que ver con las cuestiones escatológicas. Somos humanos y una mala digestión, una comida que ha sentado mal y los problemas acumulados con la flora intestital son cosas que están a la orden del día. En esta situación, un pedete que no era tal, con nuestra pareja paciendo tranquilamente al otro lado de la cama después de haber retozado juntos, puede ser un auténtico drama. Las salidas a esta situación pueden ser de lo más variado. Desde las más dignas a las más cureles. SIn entrar en detalles, algún conocido me ha comentado que salió de una situación similar a estas haciendo creer que la propietaria del regalito era la otra persona.
Otras de las situaciones violentas en la cama, sin duda, se dan por la falta de una higiene a al aaltura de las circunstancias. Descuidar los cuidados corporales básicos resulta falta. Especialmetne cuando se van a realizar juegos sexuales de cierto riesgo en este sentido. Por ejejmplo, ¿os imaginaís estar practicano un beso negro a alguien y enceontraros el pellejo de una lenteja? Resultaría bastante asqueroso, ¿no os parece? Mostar un respeto máximo a la propia higiene podría evitar que se diesen este tipo detraumas que, creedme, cuando te suceden una vez, ya duran para siempre. Recordad que la higiene intima es algo que resulta completamente imprescindible, especialmente cuando se consumern leguminosas.