El sexo con alguien con más experiencia que tú es una cosa a lo que no debemos tener miedo. Suele suceder que cuando aún te consideras un principiante, en lo que al mundo de las relaciones sexuales se refiere, y se presenta la oportunidad de mantener un encuentro sexual con m¡un hombre o una mujer de mayor edad y, por ende, con más experiencia en materia sexual, mostremos nuestro temor e, incluso, en ocasiones, quizás ocasionado por ese temor, también nuestro rechazo. En estas ocasiones, mostrarse asustado o asustado o, por qué no, cohibido o cohibida, es una reacción de lo más lógica y habitual.
El mundo de las relaciones sexuales con personas con mayor experiencia es algo que, al principio, puede resultar un poco intimidante, sin embargo, suele suceder que cuando una persona joven s introduce en él, ya no quiere salir. Como , en cualquier caso, lo difícil para casi todo es la entrada, vano s a detallarte algunos consejos por si te encontrases en una situación de este tipo y no supieses muy bien cromo reaccionar.
Lo primero que tienes que hacer es conocerte a ti mismo. Perno no de una forma general sino de manera concreta. Has de mirarte para dentro y ver qué cosas son las que realmente te gusta vivir. Para que el sexo te satisfaga a cualquier nivel, lo primero que tienes que tener claro es que el grad de conocimiento que tengas de ti mismo siempre va a jura a tu favor. Cuanto más sepas sobre tu forma de alcanzar el placer, sobre los caminos que te llevan al éxtasis, más cerca estarás de disfrutar de un encuentro sexual con alguien con mayor experiencia que tú en la cama.
Relájate y muestra confianza en ti mismo. Es fundamental la comodidad de ambas partes si lo que queremos es que el encuentro resulte satisfactorio desde un punto de vista sexual para ambos. Déjate los complejos en casa. Busca en tu interior todo tu potencial erótico y haz que salga para participar activamente. Si lo haces, tu experiencia sexual puede resultar realmente interesante.
Sorprender al compañero o compañera de juros sexuales siempre es una buena idea. Si, además, éste o ésta cuentan con más experiencia que tú, más todavía, ya que, cuando así sucede, no se lo suele esperar y los efectos de la sorpresa resultan, aún , más erotizantes, si cabe.