La postura sexual es, irremediablemente, importante a la hora de conseguir o no llegar al máximo placer. Este punto resulta especialmente importante para las mujeres que pueden ver frustrados sus deseos de alcanzar el máximo placer sexual simplemente por el hecho de no encontrar la postura sexual adecuada.
En realidad, casos siempre son las mujeres las que peor paradas salen en lo referente a la postura sexual que se adopta y la calidad del placer que obtienen. De hecho, aún son muchas aquellas que, lamentablemente, no se ven completamente satisfechas de sus experiencias sexuales. En cambio, los hombres, rea vez se privan de finalizar con éxito sus encuentros sexuales.
Son muchas las técnicas que se han difundido para evitar que esto suceda. El recorrido es amplio. Podemos escuchar consejos de toda índole. Algunos recomiendan dejarse los calcetines puestos como forma inevitable de aumentar la libido en las mujeres. Otros, en cambio, recomiendan otro tipo de cuestiones más prosaicas como ceder la iniciativa a la mujer, permitir que sea ella quien maneje los tiempos y los ritmos. Se trata, simplemente, de algunos ejemplos de las muchas recomendaciones que a este respecto existen. La lista es mucha más amplia.
Sin embargo, hemos encontrado la forma de solucionar los problemas femeninos para alcanzar el éxtasis total. Es una simple postura sexual pero se trata, sin duda, de la postura sexual definitiva. Al menos si lo que queremos es que nuestra compañera de juegos sexuales llegue a límites cercanos al paroxismo del placer.
Para que la postura sexual de la mariposa funcione de forma correcta y, por lo tanto, nos acerque a los objetivos que pretendemos, es preciso realizarla de la forma más correcta posible. De no ser, sin duda, ésta perdería eficiencia. Ella ha de tumbarse sobre algo que tenga cierta altura. Puede ser una mesa, , una cómoda o. incluso, un aparador. Una vez tumbada sobre el objeto en cuestión, ha de colocar su culo en el filo del mismo. Ella habrá de levantar sus piernas para apoyarlas en los hombres de su compañero de experiencias. tras esto, él ha de tomar su culo por debajo y comenzar la penetración.
El truco para desarrollar correctamente esta postura sexual está en encontrar el ángulo perfecto.. Si la pelvis de la mujer se encuentra a la altura idónea, la penetración alcanzará un mayor nivle de profundidad. Si, además, el hombre coloca, tiernamente, su pulgar sobre el clítoris de la penetrada, la intensidad del placer crecerá exponencialmente.