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Lubricantes con sabor a coño

Lubricantes con sabor a coño. Éste es del grito de guerra y, sin duda, no puede ser más explícito. Parece desarrollado por un verdadero experto en marketing social. Cada vez es mayor la comunidad de voces que se alzan pidiendo, a las marcas fabricantes productos para sexo, un lubricante con sabor a coño. Tenemos todo tipo de sabores y olores en los lubricantes que se fabrican actualmente. Sabores y olores a fresa, plátano, sandia, melón, naranja, kiwi y una amplia gama de frutas. También hay una amplia colección de otro tipo de alimentos de muy diferente naturaleza que van desde el chocolate hasta la vainilla, pasando por el ajo e, incluso, la cebolla. Sin embargo, no existe ningún lubricante en el mercado con sabor a coño.

El problema que ven aquellos que demandan un lubricante con sabor a coño es la pérdida de la esencia del lubricante. La gran cantidad de diferentes lubricantes que ofrece el mercado cumplen con su función de lubricar con absoluta solvencia. Mejoran, si cabe, el tacto que una lubricación natural puede proporcionar. Además, en aquellas mujeres con problemas para hacerlo de forma natural son una solución de altísimo nivel. Sin embargo, este tipo de lubricantes tienen un problemas y es que su sabor y olor eliminan el olor a coño y esto, para algunos, supone un gran inconveniente.

Existen una gran cantidad de hombres que disfrutan con el sabor tradicional de una vagina. Piensan que comerse una vagina con sabor a meló puede ser muy divertido pero les recuerda más a la sobremesa familiar en la comida de los domingos, tras la paella de turno, con la abuela, la mujer  los hijos y los nietos, que a una práctica sexual satisfactoria. Muchas reclaman, pues las innegables bondades de los lubricantes pero son encubrir el sabor a flujo vaginal característico de tan noble parte de la anatomía femenina. La solución que proponen está clara: el lubricante con sabor a coño.

No nos cabe ninguna duda de que esta demanda, más que justificada por otro lado, no caerá en saco roto y que no en demasiado tiempo alguno de los fabricantes de este tipo de productos recogerá el guante y se pondrá manos a la obra para ponerla en el mercado.

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