La actividad sexual es muy importante. Podemos decir que el sexo es bueno para nuestra salud. Se ha demostrado que la sexualidad está relacionada con la salud en general de los seres humanos y los estudios científicos lo han justificado. Las conclusiones de estos estudios son claras: el buen sexo hace más feliz a las personas. El sexo, pues, es una cuestión fundamental para una buena salud y, por supuesto, para tener una buena calidad de vida. Pero la historia no acaba ahí, también sabemos que la frecuencia de las prácticas sexuales y el grado de placer asociado con él son indicadores significativos relacionados, de nuevo, con la salud y con la calidad de vida. La actividad sexual estimula la producción de endorfinas que son sustancias beneficiosas para la salud. Estas endorfinas promueven sentimientos de placer y relajación y por lo tanto alivian el estrés. La actividad sexual nos da salud y calidad a nuestra vida.
La actividad sexual en las mujeres también aumenta la secreción de oxitocina, una hormona beneficiosa para el pecho que, además, hace aumentar las sustancias lubricantes de la vagina, imprescindibles para mantener su elasticidad. En el caso de los hombres, hace aumentar la testosterona, lo que redunda en unos huesos y músculos sanos. La ciencia confirma que la práctica de la actividad sexual puede prevenir la hipertensión, la depresión y varios tipos de cáncer como el de mama o próstata.
La ausencia de actividad sexual tiene consecuencias. Cuando hablamos aquí de la falta o ausencia de relaciones sexuales, hablamos de una persona que no se involucra en las relaciones sexuales o su forma de practicar sexo es inadecuada. Las razones pueden ser complicadas. Los motivos que llevan a una persona a mantener la abstinencia sexual pueden ser muy variadas pero, al tratarse de un asunto tan personal, debe ser cada cual el que decida sobre ello.
Pero vamos a centrarnos en los efectos que la falta de actividad sexual puede llegar a tener. La relación sexual es esencial para todas las personas normalmente constituidas. La ausencia, si se produce de forma ocasional no es realmente grave. Por supuesto, como cualquier ausencia, puede causar una especie de ansiedad y sensibilidad que se manifieste, incluso, de forma inconsciente. Pero es posible encontrar soluciones para estos vacíos y reemplazarlos por la masturbación o, incluso, con alguna otra actividad como el deporte.