La bisexualidad, tanto en hombres como en mujeres, si lo vemos de un punto de vista exclusivamente científico, significa tener una atracción psicológica o física hacia personas de ambos sexos. Así que, consideramos que una mujer bisexual puede amar o ser atraída sexualmente tanto por hombres como por mujeres. Por lo tanto, no debemos confundir, en ningún caso, la bisexualidad con la homosexualidad que, en cambio, es el hecho de ser atraído por personas del mismo sexo.
La bisexualidad es a menudo el resultado de un proceso evolutivo bastante complejo. Algunas mujeres afirman que fueron primero heterosexuales, luego homosexuales y, finalmente, bisexuales, mientras que otras aseguran que la orientación bisexual se les había manifestado de una manera demasiado obvia desde la adolescencia. De lo que no cabe ninguna duda es de que ser bisexual resulta una manera estupenda de intentar abrirse a todos los aspectos del sexo.
La bisexualidad parece que es más común en las mujeres. Algunos estudios científicos muestran que todos nacemos con una predisposición a la bisexualidad y todos los heterosexuales, en algún momento de la vida, han sentido atracción sexual o sentimental hacia otra persona del mismo sexo, sin tener ninguna orientación homosexual de por medio. Esta predisposición natural a la bisexualidad, no obstante, parece más fuerte en las mujeres.
Para la mayoría de las mujeres, la atracción hacia personas del mismo sexo puede ser expresada de una manera más sutil que la explicita atracción sexual. ¿Podría ser que los lazos entre las mujeres son más fuertes que las que existen entre los hombres? En algunas mujeres, la atracción puramente física a las parejas femeninas se fortalece cuando se pasa a la acción. Por lo tanto, puede que ese último paso que hay entre el deseo y pasar definitivamente a la acción dependa, en gran medida, de la cantidad de oportunidades que surjan. Por supuesto, el contexto sociocultural y el entorno inmediato pueden influir en esta tendencia, siendo realistas, para obstaculizarla o alentarla- En determinadas sociedades la bisexualidad no está bien vista y puede suponer un problema a la hora de ponerla en práctica.
Según esta teoría, la bisexualidad reside en todos y cada uno de nosotros, incluso si estamos muy satisfechos con nuestra orientación sexual actual.