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El problema de la eyaculación precoz

Los tabúes han dejado durante mucho tiempo en la oscuridad el problema de la eyaculación precoz que, en realidad, es muy común. En la mayoría de los casos, la vergüenza a no ser eficiente,  hace que los hombres que padecen el problema de eyaculación precoz sean,  a menudo, reacios a hablar de ello.

Hablamos de eyaculación precoz cuando un hombre eyacula demasiado pronto. Pero ¿qué es demasiado pronto? ¿Cuál es la norma? ¿Es una cuestión de cumplir un tiempo mínimo?  No existe un tiempo mínimo que cumplir. El problema de la eyaculación precoz es la falta de control sobre la eyaculación. Ésta se produce cuando no queremos que así sea.

Uno de cada tres hombres se enfrentan a este problema. El 37% de los hombres dicen que sufren de eyaculación precoz con mucha frecuencia.  A pesar de ser un problema que puede afectar seriamente a la calidad de las relaciones sexuales, no estamos ante una enfermedad. Hasta el momento no se sabe muy bien por qué algunos hombres controlan fácilmente su eyaculación mientras que otros no son capaces de lograrlo.

Investigaciones recientes sugieren que los neurotransmisores cerebrales juegan un papel importante en la capacidad de retrasar la eyaculación. El estrés y la ansiedad aceleran la eyaculación. Sin embargo, no son éstos los únicos factores responsables de la eyaculación precoz.

Es frecuente que los adolescentes, durante sus primeras relaciones sexuales, experimenten algún episodio de eyaculación precoz. Sin embargo, lo normal es que con el paso del tiempo y la adquisición de experiencia, vayan aprendiendo a controlar la eyaculación. Parece que, precisamente, la forma en que desde la pubertad se masturban los hombres puede ser una de las causas por las que se produce la eyaculación precoz. La masturbación rápida con el único objetivo de eyacular cuanto antes puede que acabe adaptando al organismo a la pérdida de control sobre la eyaculación, degenerando, finalmente, en la no deseado eyaculación precoz.

Parece que algunos antidepresivos inhibidores de la recaptación de serotonina han demostrado ser medicamentos efectivos para retardar la eyaculación en aquellos que sufren eyaculación precoz. En la actualidad son los tratamientos farmacológicos que mejor resultado dan para tratar el problema.

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